SERIE: Tiro defensivo
Durante los años en que llevo desarrollando la actividad, he tenido la oportunidad de desplazarme por diversos lugares geográficos enseñando y aprendiendo de la disciplina del tiro. En el caso particular de mi país he podido visitar lugares entre Iquique y Coyhaique, habiendo constatado del entusiasmo de quienes inician sus primeros pasos y de la sabiduría de quienes llevan más años.
Sin embargo un común denominador entre los tiradores defensivos/ deportivos, es la escasa cultura de preparación ante un evento que altere la seguridad, lo que afortunadamente ha ido cambiando en los últimos 3 o 4 años.
En cada ocasión que estuve en estos lugares, pregunte ¿Qué pasa si? ...
(La pregunta estrella de los S.A.S (1) para sus planes de contingencia)
Por otra parte, también es pertinente mencionar la bajísima tasa de accidentes de la actividad, sin ir más lejos, los datos revelan que otros deportes presentan más “lesionados de fin de semana”. Pero este hecho no es un talismán.
Convengamos en algo, la actividad es de riesgo, como muchas otras, pero con las adecuadas medidas de control esta condición se gestiona de manera muy importante. Sea este artículo entonces un apoyo a complementar lo que clubes hoy poseen y desarrollan.
La prevención y la preparación ante accidentes o sucesos de índole médico son de vital importancia en el ámbito de en un polígono de tiro.
Es fundamental contar con conocimientos básicos en atención pre-hospitalaria para poder brindar una respuesta rápida y efectiva, estabilizando a la víctima y esperando la ayuda o, en caso necesario, realizando un traslado seguro.
El primer paso para la prevención y preparación es educar a los participantes sobre los posibles riesgos y situaciones médicas que puedan presentarse durante el desarrollo de la actividad. Es importante impartir información sobre los procedimientos básicos de primeros auxilios, como la reanimación cardiopulmonar (RCP), control de hemorragias, estabilización de fracturas y otras destrezas.
Además, se debe promover la conciencia sobre el uso adecuado del equipo de protección personal, como gafas de seguridad (2) y protectores auditivos (3), para evitar lesiones oculares y auditivas. (Protocolo de Seguridad)
Se debe fomentar la creación de un equipo de respuesta en emergencias, conformado por personas capacitadas en primeros auxilios y con conocimientos específicos en atención pre-hospitalaria. Este equipo deberá estar preparado para actuar rápidamente en caso de un accidente o situación médica, brindando los primeros cuidados necesarios hasta la llegada de los servicios médicos especializados. El equipo debe ser complementado con alguien a cargo de las comunicaciones, del transporte si fuese necesario y de la contención inicial del resto de participantes.
Tenga en cuenta que las situaciones más comunes que pueden presentarse son como quemaduras, erosiones en las manos o rodillas, no requieren de equipo o conocimientos especiales. Otra cosa son los picaduras de insectos (posible shock) desmayos por condiciones médicas preexistentes o un trauma balístico.
Es esencial destacar que la respuesta ante cualquier accidente o situación médica debe ser siempre proporcional al nivel de capacitación y conocimiento de cada persona. Si un participante no cuenta con los conocimientos suficientes para brindar atención, deberá enfocar su función en alertar a los servicios de emergencia y permitir el arribo de estos. (Señalizar la ruta, abrir el portón, etc.)
He aquí la importancia de no improvisar y designar tareas, previo al inicio de cada práctica.
Nuestra recomendación también apunta a los clubes, e imperativamente a cada uno de los tiradores, en poseer los elementos necesarios para responder (IFAK o solo FAK (4))
En resumen, la prevención y preparación ante accidentes o sucesos médicos en el ámbito del tiro en un polígono son fundamentales. A través de un briefing de seguridad, de educación, capacitación en primeros auxilios y formación de un equipo de emergencias, se puede garantizar una respuesta efectiva y adecuada frente a cualquier eventualidad.
El paso previo a esto como indicábamos es la prevención, para ello la totalidad de los asistentes deben conocer y respetar las normas de seguridad establecidas y reconocer la autoridad de quien está a cargo de la actividad.
Además cada persona puede y debe ser consciente en todo momento del comportamiento de sus pares y puede perfectamente observar si existe alguna conducta o situación de riesgo.
La conciencia sobre los posibles riesgos, la utilización del equipo de protección personal y contar con el equipo de primera respuesta son parte de la seguridad y el bienestar de todos los involucrados.
(1) S.A.S : Special Air Service. Fuerzas Especiales del ejército británico.
(2) Gafas de seguridad: Se recomienda protección ocular balística certificada.
(3) Protectores auditivos: Se recomienda protección auditiva electrónica.
(4) IFAK: Individual First Aids Kit. Kit de primeros auxilios individual